Adaptado al español por Isa Traverso del artículo original (English version) escrito por Sergio Ávila para el Sierra Club.
El viernes 7 de Mayo hice mi rutina normal para salir a correr por la mañana: tomar café, ponerme la ropa y los zapatos, ir al baño, cepillarme los dientes, estirarme un poco. Este fue el último día de una semana emotiva y necesitaba la medicina de salir a correr. El día anterior se había publicado un video de la persecución y asesinato de Ahmaud Arbery, un corredor Negro en Georgia. Fue un video violento y horrible, con comentarios racistas de los perpetradores, terminando con una pelea donde Ahmaud fue asesinado a tiros.
Unos días antes, el 5 de Mayo, comunidades de Nativo-Americanos recurrieron a las redes sociales por la campaña anual para crear conciencia sobre las Mujeres y Niñas Indígenas Desaparecidas y Asesinadas (MMIWG). Esta crisis actual en toda Norteamérica es causada por la negación de las autoridades federales para investigar estos crímenes y llevar ante la justicia a los perpetradores, principalmente Caucasicos, que a menudo trabajan en tierras Nativas remotas como parte de industrias extractivas del petróleo, el gas y la minería. Según informes oficiales, Arizona ocupa el tercer lugar de casos de Mujeres y Niñas Indígenas Desaparecidas y Asesinadas, y Tucson ocupa un lugar destacado entre las ciudades de Estados Unidos. La crisis no es solo la muerte sino también la falta de datos. Por ejemplo, en 2016, el Centro Nacional de Información sobre Delitos informó que casi 5.712 mujeres Indígenas desaparecieron o fueron asesinadas a nivel nacional, pero solo 116 fueron registradas por el Departamento de Justicia ese año.
Me preparé para correr pensando en lo que había pasado en la semana, y cuando abrí la puerta me quedé congelado por el miedo. Esa mañana no pude salir de mi casa. No podía salir a correr regularmente como la mayoría de los días. Sentí miedo por mi propia vida y la posibilidad de que nadie en mi comunidad de corredores supiera lo que me pasó, incluso cuando traté de racionalizar que "esto no sucede aquí". Nunca antes había sentido este miedo al salir a correr, a pesar de que agentes de la Patrulla Fronteriza y los vigilantes paramilitares Minutemen me habían amenazado con armas mientras trabajaba en la frontera, pero esa es otra historia. No salí a correr esa mañana, y eso me afectó aún más.
Me sorprendió darme cuenta de que muchas otras personas podrían sentir este miedo todos los días, y que nunca antes consideré esa posibilidad. En ese momento pude relacionarme con la sensación de temer por mi vida mientras realizo una actividad de rutina, como correr, conducir a la tienda, ir a mi trabajo o hacer una barbacoa en el parque. No corrí esa mañana y el miedo que sentí me afectó. Estaba triste, asustado, enojado y muy solo, preguntándome cuántos corredores en mi comunidad sienten este miedo. ¿Cuántos están corriendo ahora sin miedo o incluso considerando que correr es un problema para su seguridad? ¿Cuántos corredores, Negros e Indígenas, tienen que equilibrar el riesgo de hacer su carrera diaria? ¿A quién más no estoy viendo?
Foto por Kerry Whelan
El asesinato de Ahmaud Arbery y el homenaje a las Mujeres y Niñas Indígenas Desaparecidas y Asesinadas resaltan las crisis en el país de las cuales muchas personas no son conscientes, y poco saben que estas crisis afectan a sus propias comunidades. Estos no son eventos aislados. Estas crisis son invisibles para muchas personas, sin embargo, infligen y aumentan el trauma histórico que afecta constantemente a madres, niños, familias y comunidades completas de Negros e Indígenas y Personas de Color (BIPOC).
El viernes por la noche corrí por Ahmaud y publiqué sobre eso en mis redes sociales. Sin embargo, mi publicación no me hizo sentir más seguro, y definitivamente no hizo nada por la familia de Ahmaud ni por la comunidad Negra en general. Publicar mi foto de Black Lives Matter fue un esfuerzo vacío, nada más que "acción de actuación" como lo hicieron muchas otras personas ese día. No contribuí mucho más que publicar una foto y un hashtag. Lo que realmente quería era una acción que me afectara positivamente a mí, a mis amigos y vecinos, y nos ayudará a sentirnos seguros al correr (o durante cualquier otra parte de nuestras vidas), algo que realmente abordaría estos problemas. Esa noche me fui a la cama con la culpa y el vacío de un trabajo que no se había completado; no era suficiente simplemente publicar una fotografía.
Todo esto sucedió antes de los asesinatos de George Floyd, Breonna Taylor, Nina Pop, Sean Monterrosa, Jamel Floyd, Tony McDade, James Scurlock, David McAtee y muchos otros a manos de la policía y civiles blancos. A estas alturas, ya has visto cómo se desarrollaron manifestaciones y protestas en todo el país y el mundo. Tal vez viste los videos de los asesinatos (tienes esa opción), tal vez publicaste en línea o protestaste en las calles, o tal vez te quejaste de los "saqueadores".
Ha sido un mes de protestas por los derechos civiles derivados de eventos hechos públicos gracias a que todos tienen una cámara en los bolsillos. No cabe duda que estos eventos (el racismo abierto y encubierto, el linchamiento, la gente que llama a la policía por la presencia de Afroamericanos, la brutalidad policiaca y más) han sucedido durante siglos, pero solo ahora algunos son más conscientes de las interacciones que los Negros, los Indígenas, Lesbianas, Gays, Bisexuales, personas Transgénero, Queer y muchas personas más pasan todos los días. Ha sido un mes muy difícil para algunos de nosotros, pero reconozco que han sido 400 años muy difíciles para mucha gente. El trauma histórico es real. Y esto se conecta con la comunidad de corredores. Como escribí en mi publicación: “Algunas personas corren en valles de privilegio y olvido; otros libran una batalla rocosa y cuesta arriba todos los días ".
Foto por Tim D. Peterson Jr.
Si en este punto te sientes a la defensiva, culpado o atacado, comprende: no se trata de tus sentimientos. La conciencia generada a través de estos eventos ha llevado a grandes estrellas como Meb Keflezighi y Kareem Abdul-Jabbar a compartir sus experiencias y luchas que ocurrieron durante sus ilustres carreras. También puedes leer "Corriendo siendo negro: nuestros lectores responden" del New York Times para ver lo que viven los corredores promedio a diario mientras corren.
Hay muchas cosas que puedes hacer para mejorar las experiencias de los corredores de BIPOC en nuestra comunidad para que se sientan cómodos y bienvenidos, para que sientan que pertenecen, independientemente de su estado físico o tiempos de finalización.
El paso más importante es la auto-transformación: edúcate a ti mismo; Google es tu amigo. Sé curioso y consciente de los problemas que afectan a algunas comunidades, no te pongas a la defensiva. Reconoce que eres parte de una sociedad que ha creado estructuras de poder y privilegios, y que desempeñas un papel en ella. Esto no se trata de tus sentimientos; se trata de sus experiencias, que incluye sus muertes.
Deja de decir "No veo el color" o cualquier variación del mismo ("todas las personas son iguales para mí" o "todas las vidas importan"). Esta supuesta ‘ceguera’ es una forma de desviar la responsabilidad, y solo sirve para que los blancos se sientan cómodos. Eso te protege de conocer las realidades de diferentes poblaciones y tener conversaciones incómodas, pero no te permite ver sus desafíos. Esta es la razón por la que decimos que las Vidas Negras Importan (Black Lives Matter), específicamente porque las personas Negras están continuamente vigiladas, sujetas a discriminación y a todo tipo de escrutinio.
Trabaja en equidad e inclusión, no solo en diversidad. La comunidad de Tucson es una comunidad diversa, pero ¿es incluyente? ¿Todos se sienten escuchados o vistos? ¿Todas las voces y experiencias están representadas en grupos, empresas o juntas directivas? La inclusión es un sistema donde todos se sienten cómodos, escuchados, vistos, un ambiente donde la diversidad se expresa y se acepta, no solo para una foto o una reunión.
Haz que las personas sientan que pertenecen a tu grupo en lugar de hacerlas sentir que tienen que encajar, debe ser tu esfuerzo, no el de ellos. Tú llevas la carga. Comprende la diferencia entre ‘pertenecer’ y ‘encajar’ y dale la bienvenida a diferentes personas en su propio espacio. No seas condescendiente. Reconoce su humanidad, sus antecedentes, discapacidad, forma física. Y, lo más importante: contratalos para roles en tus organizaciones o eventos, y paga por su trabajo y experiencia.
Diversifica tus modelos a seguir: lee y ve autores, libros, documentales y atletas no blancos. Apoya a las empresas que no son blancas. Regístrate para carreras en diferentes lugares. Sigue y comparte modelos e historias de corredores que no sean blancos, no solo aquellos que conquistaron montañas o que corrieron más tiempo o alcanzaron el punto más alto: todas estas son historias de privilegio. Lee acerca de correr desde la perspectiva de las personas para quienes correr es una práctica ancestral, una ceremonia, un evento comunitario, no solo una salida para obtener medallas o viajar alrededor del mundo.
Ver, confrontar y detener el racismo, el sexismo, la homofobia, la transfobia y otros actos discriminatorios es responsabilidad de todos. Es posible que no tengas la culpa, pero es tu responsabilidad hacer algo para interrumpir comportamientos, sistemas y prejuicios ampliamente aceptados en la sociedad.
Sergio es biólogo y conservacionista de la vida silvestre, inmigrante y corredor que vive en las tierras ancestrales de las tribus Tohono O'odham y Pascua Yaqui desde 2004. Trabaja como Coordinador del Programa de Excursiones Locales con Sierra Club, es miembro de la Comisión sobre Clima, Energía y Sostenibilidad de la Ciudad de Tucson , y miembro de la Mesa Directiva de la Sociedad para la Biología de la Conservación, Capítulo de América del Norte. Se le puede encontrar en Twitter e Instagram @Sergio_concolor o corriendo por el Desierto Sonorense alrededor de Tucson.