El Puertorriqueño Ramón Cruz Elegido Primer Presidente Hispano del Sierra Club/Puerto Rican born Ramón Cruz Elected First Latino President of the Sierra Club

 



(English follows)

Ramón Cruz ha sido elegido presidente del Sierra Club, el primer hispano en llegar a esta posición en los 128 años de historia de la institución. La Junta Directiva Nacional del Sierra Club la eligen democráticamente los miembros de la organización y sirve a sus 3,8 millones de miembros y seguidores.

“Me siento honrado y congraciado por haber sido elegido presidente, y especialmente privilegiado de ser el primer presidente latino del Sierra Club y proveniente del capítulo más joven de nuestra organización, el de Puerto Rico”, dijo Cruz. “Reconozco que mi mandato surge durante la enormemente difícil pandemia de COVID-19, coincidiendo con la sombría amenaza al medio ambiente de la administración Trump. Al mismo tiempo que los retos que confrontamos son sobrecogedores, la magnitud de nuestra respuesta tiene que cumplir con la responsabilidad de asegurarnos que defendamos las políticas que prioricen la protección de los más vulnerables de nuestra sociedad”.

Cruz se graduó de American University, en Washington, DC, y de Princeton University en Nueva Jersey y posee más de 20 años de experiencia en defensa de los valores de la sustentabilidad, medio ambiente y política energética, planeamiento urbano, y cambio climático. Ha trabajado en el sector privado como subdirector de la agencia estatal reguladora del medio ambiente en Puerto Rico, ostentó posiciones de liderazgo en el Environmental Defense Fund, Partnership for New York City y el Instituto para Políticas de Transporte y Desarrollo.

“Ramón Cruz es un líder que ha dedicado su vida a proteger y preservar el medio ambiente y el Sierra Club lo recibe con entusiasmo como nuestro nuevo presidente”, dijo Michael Brune, director ejecutivo del Sierra Club.

Las prioridades de Cruz como presidente incluyen:

  • Avanzar el movimiento del Sierra Club hacia la equidad y la justicia, especialmente asegurándose de que la organización sea un espacio inclusivo para que todos contribuyan a un medio ambiente seguro, trabajando conjuntamente con grupos locales de todo el país de acuerdo con los Principios de Jémez.
  • Redoblar los esfuerzos de la organización para derrotar la agenda antiambiental de la administración Trump y el ejército de cabilderos de las industrias contaminantes que ha puesto al frente de importantes agencias del gobierno.

En esta entrevista, Cruz habla de sus experiencias, motivaciones y visión de futuro para el Sierra Club.

1) ¿Qué despertó tu interés en los temas ambientales?
Mi madre fue una gran influencia en mí. Ella formó un club ecológico en la escuela que recolectaba materiales para ser reciclados, cuando casi nadie en Puerto Rico reciclaba. Yo era parte de ese club. Mis familiares también se reunían en cada ocasión especial en un rincón maravilloso en las montañas tras el Bosque Pluvial El Yunque y desde temprano me di cuenta del valor de lugares bellos y prístinos. Llegué al movimiento ambiental por medio de activismo social en la universidad. Admiraba muchos de los movimientos sociales del siglo 20, especialmente en América Latina, y aprecié la interconexión entre ellos —antiguerra, derechos humanos, derechos de la mujer, el medio ambiente. Mientras lideraba el Club Latino en American University, trajimos a activistas de América Latina para hablar en el campus que ayudó a que me radicalizara un poco. Recuerdo a una exguerrillera de Uruguay que se hizo activista ambiental y que tuvo un gran impacto en mí al relatar su travesía y cómo luchar por una sociedad justa y equitativa es la misma pelea que preservar la naturaleza para todos, especialmente para los que no han nacido todavía.  
Años más tarde, mi arresto como parte del movimiento para detener las prácticas de bombardeo de la Marina en la isla de Vieques definió aún más mi vocación y compromiso con la defensa y la política ambiental.

2) ¿Cómo oíste por primera vez del Sierra Club?
No oí del Club hasta que llegué a la universidad en Washington, DC, ya que por entonces no existía el Capítulo de Puerto Rico. Cuando trabajaba en el Programa del Estuario de la Bahía de San Juan, me hice amigo de muchos de los miembros que forman mi generación de activistas ambientales en Puerto Rico y que eventualmente establecerían el Capítulo de Puerto Rico. Recuerdo haber conocido a Camilla Feibelman durante la Cumbre de Liderazgo Ambiental de Personas de Color en 2002 y hablar de ello sin imaginarme que años más tarde ella se convertiría en la directora del Capítulo de Puerto Rico, ni que un día yo sería el presidente nacional. Tras obtener un título superior en política pública y planeamiento urbano y regional en Princeton University, me mudé a Nueva York y conseguí un trabajo en el Environmental Defense Fund, donde colaboré con el Sierra Club y una coalición de grupos locales para proteger el Corredor Ecológico del Noreste en Puerto Rico.

3) ¿Por qué es importante que el Sierra Club tenga ahora un presidente hispano?
Los hispanos somos una demografía creciente que representa el futuro del país. Como vemos con Alexandria Ocasio Cortez, creo que el futuro es femenino y habla español. Al oír las palabras racistas y tendenciosas contra los hispanos de Donald Trump, es simbólico que dos de las mayores organizaciones progresistas del país —la ACLU y nosotros— tengan a puertorriqueños al mando. Si esperamos derrotar a Trump en noviembre, los votantes hispanos van a ser claves.
Además, vengo de un lugar con una larga historia de colonización vinculada con la degradación ambiental, desde las pruebas militares de Agente Naranja y los bombardeos a la isla de Vieques y la más reciente inexcusable respuesta al Huracán María. Es atroz que a ciudadanos estadounidenses —y los Puertorriqueños lo somos— se nos trate como segunda clase. Cinco de mis tíos lucharon en la guerra de Corea y uno de ellos murió. El desdén con el que la administración Trump trató a Puerto Rico tras un desastre de tal magnitud, en el que algunas personas no tuvieron electricidad durante un año, es pasmoso, especialmente porque hay tantas lecciones que aprender sobre cómo lidiar con desastres que serán comunes debido a este clima cambiante.

4) ¿Cuál es tu visión para el Sierra Club?
Mi visión tiene dos vertientes y son consistentes con las mayores inversiones que el Sierra Club ha prometido durante la década. Primero, expulsar a Trump de la presidencia y movilizar a la mayor cantidad de personas para secundar este esfuerzo. Y segundo, asegurarme de que los principios y prácticas de equidad y justicia empapen todo lo que hacemos. Tenemos que predicar con el ejemplo. Debemos ser uno de los líderes en esta área.

5) ¿Por qué la equidad, inclusión y justicia son tan vitales para nuestra organización?
Porque es lo correcto y justo. Por demasiado tiempo, organizaciones como el Sierra Club tuvieron una actitud displicente en un sistema en el que las injusticias prevalecían. Entendemos que no vamos a alcanzar nuestras metas ambientales a no ser que todos, dentro de la organización y en el movimiento, sigamos priorizando absolutamente la justicia ambiental.

6) ¿Hay otros detalles personales que te gustaría compartir, como qué haces en tu tiempo de ocio?
Me gustan la mayoría de las actividades al aire libre. Me gusta navegar a vela en las aguas alrededor de Nueva York, la horticultura en la primavera y el verano, cocinar platillos de otros países donde he vivido, ir en bici a casi todos los sitios, y caminatas, escaladas y bucear en los diferentes países que he tenido el privilegio de visitar —unos 75— mayormente durante viajes relacionados con los procesos de política ambiental internacional de las Naciones Unidas. Vivo en ciudades y me encantan los parques, restaurantes de diferentes etnias y los museos.

Otros miembros de la Junta Directiva elegidos incluyen a Ross Macfarlane del Estado de Washington (vicepresidente); Natalie Lucas de Ohio (secretaria); Mike O’Brien del Estado de Washington (tesorero), y Debbie Heaton de Delaware (quinta oficial).

(English)

Ramón Cruz Elected First Latino President of the Sierra Club

Ramón Cruz has been elected as the Sierra Club’s new president, becoming the first Latino to hold that position in the organization’s 128-year history. The Sierra Club’s National Board of Directors is democratically elected by the organization’s membership and serves its 3.8 million members and supporters.

“I’m honored to be elected president of the Sierra Club and excited to be the first Puerto Rican to hold that position,” said Cruz. “I recognize that my term comes during the enormously difficult and unprecedented COVID-19 pandemic and the dark days of the Trump administration. The challenges we face are daunting, and we must meet them by advocating first and foremost for policies that protect the most vulnerable among us.”

Cruz holds degrees from American University in Washington D.C. and Princeton University in New Jersey. He has over 20 years of experience in advocacy at the intersection of sustainability, environmental and energy policy, urban planning, and climate change. He has worked as Deputy Director of the state environmental regulatory agency in Puerto Rico, and held senior positions at the Environmental Defense Fund, the Partnership for New York City, and the Institute for Transportation & Development Policy.

“Ramón Cruz is a leader who has dedicated his life to protecting and preserving our environment, and the Sierra Club is thrilled to have him as our president,” said Sierra Club executive director Michael Brune.

Among Cruz’s top priorities as Sierra Club president are:

  • Advancing the Sierra Club’s movement toward equity and justice by ensuring that the organization is an inclusive space for all people, and by partnering with local groups nationwide in accordance with the Jemez Principles.
  • Doubling down on the Sierra Club’s work to defeat the anti-environmental agenda of the Trump administration and the fleet of industry lobbyists and associates he has put in charge of the most important governmental agencies.

 
Learn more about Cruz’s background, motiviations, and vision for the Sierra Club in this Q&A.

1) What first sparked your interest in environmental issues?
My mother was a big influence on me. She formed an ecology club in school that collected materials to recycle, when  almost no one in Puerto Rico was recycling. I was part of that club. My extended family would also gather at every special occasion in a beautiful spot in the mountains behind the El Yunque National Rainforest and early on  I realized the value of  beautiful, pristine places.
I arrived to the environmental movement through social activism while in college.  I admired many of the social movements of the 20th Century, especially in Latin America and valued the interconnection between them -- anti-war, human rights, women’s rights, the environment While leading the Latino Club at American University, we brought activists from Latin America to speak on campus that helped radicalize me a little bit. I remember a former guerrilla fighter turned environmental activist from Uruguay who had a big impact on me as she told me her journey and how fighting for a just, equitable society is the same fight as preserving nature for everyone, especially those who are not born yet.  
Years later, my arrest as part of the movement to get the US Navy to stop practicing bombing in the island of Vieques further defined my career and commitment to environmental advocacy and policy.

2) How did you first hear about the Sierra Club?
I didn’t hear about the club until college in Washington D.C.since there wasn’t yet a Sierra Club chapter in Puerto Rico when I was growing up. While working at the San Juan Bay Estuary Program, I became friends with many of the colleagues that form my generation of environmental activists in Puerto Rico and who were key in starting the Puerto Rico Chapter. I remember meeting Camilla Feibelman during the 2002 People of Color Environmental Leadership Summit and talking about it without even imagining that years later she would  become the Puerto Rico chapter director or that one day I would be its national President.  After earning a graduate degree in public policy and urban and regional planning from Princeton University, I moved to New York City and got a job with the Environmental Defense Fund, where I collaborated with the Sierra Club and a coalition of local groups to protect Puerto Rico’s Northeast Ecological Corridor.

3) Why is it important that the Sierra Club finally has a Latino president?
Latinos are a growing demographic that represent the future of the country. As we can see with AOC, I believe the future is female and it speaks Spanish. As we listened to Trump’s racist and divisive rhetoric against Latinos, it is symbolic that two of the biggest progressive organizations in the country - the ACLU and us, have a Latino and Puerto Rican in its helm.  If we hope to defeat Trump in November, Latino voters are going to be key.
In addition, I come from a place with a long history of colonization linked to environmental degradation, from military agent orange trials and the Vieques island bombing to the recent inexcusably inadequate response to Hurricane Maria. It's appalling that US citizens -- and Puerto Ricans are US citizens -- are treated as second class. Five of my uncles fought in the Korean War and one of them died.  The contempt with which the Trump administration treated Puerto Rico after a disaster of that magnitude, where some people had no electricity for over a year, is perplexing; especially where there are so many lessons to be learned about how to deal with disaster, that are prompt to be a common scenario under a changing climate.

4) What is your vision for the Sierra Club?
My vision is twofold and consistent with the biggest investments that the Sierra Club have pledged in over a decade: First, getting Trump out of office and mobilizing as many people as possible to become active in that effort.  Second,  to ensure that the principles and practices of equity and justice permeate and be embodied in everything we do.  We need to walk the talk. We should be one of the leaders in this area.

5) Why are equity, inclusion, and justice (EIJ) so vital to our success as an organization?
In short, because it’s the right and fair thing to do. For far too long, organizations like the Sierra Club were complacent in a system where inequities prevailed. We understand that  we won’t reach our environmental goals unless all of us, both within the organization and in our movement, keep putting EIJ front and center.

6) Are there other details about yourself that you'd like to share like what do you do in your leisure time?
I enjoy most outdoor activities.  I like sailing around New York Harbor, gardening in the spring and summer, cooking food from other countries I have lived in, riding my bicycle nearly everywhere I go, and hiking ,rock-climbing or scuba diving in different countries I had the privilege to visit - around 75 - mostly during trips while working around the international environmental policy processes of the United Nations.  I’m also an urbanite and love city parks, restaurants of different ethnicities and museums. 

Other newly elected officers for 2020-2021 are Ross Macfarlane of Washington state (vice president); Natalie Lucas of Ohio (secretary); Mike O’Brien of Washington state (treasurer); and Debbie Heaton of Delaware (5th officer). Newly elected directors are Rita Harris of Mississippi, Marion Klaus of Utah, and Patrick Murphy of Texas.