Los Puertos de México en el Pacífico y en la Costa de Texas Podrían Sentir el Impacto de la Decisión
Portland, Oregón — Los puertos de la costa pacífica de México y los de las costa de Texas, especialmente Houston, podrían sentir el impacto del decidido rechazo de la construcción de una terminal portuaria de exportación de carbón en el río Columbia, en Oregón.
El Departamento de Terrenos Estatales de Oregón (DSL) rechazó hoy un permiso de exportación carbonera de Ambre Energy, una decisión histórica que significa un duro golpe a las ambiciones de esta compañía y la primera vez en el noroeste pacífico que un estado rechaza un permiso de exportación carbonera.
“Por todo Oregón y el noroeste del país, miles de empresarios, funcionarios electos, doctores, líderes espirituales y otros han exigido al Gobernador Kitzhaber y al estado de Oregón proteger a las familias del estado y las comunidades de primera línea de los peligros de la exportación de carbón. Y hoy esas exigencias fueron respondidas”, dijo Arlene Burns, presidenta del concejo de Mosier, OR.
El rechazo podría tener importantes consecuencias ya que la industria carbonera buscaría otras alternativas para exportar su producto tóxico, como los puertos de Texas —especialmente Houston— y los de la costa mexicana del Pacífico. Estas comunidades se verían expuestas a las mismas amenazas de salud pública asociadas con estas exportaciones.
“Esta decisión, además de que el consumo de carbón en China se espera que descienda, deja claro que la exportación carbonera no tiene futuro”, dijo Devin Martin, representante de la campaña Más Allá del Carbón del Sierra Club. “Esta decisión animará a grupos locales a oponerse a las exportaciones de carbón en toda Norteamérica. Desde Canadá, al estado de Washington, pasando por el Golfo de México, las comunidades están rechazando las exportaciones carboneras”.
Más de 3,000 profesionales médicos y defensores públicos han solicitado el rechazo del proyecto conocido como Morrow Pacific. El carbón contiene venenos como el arsénico, plomo, mercurio y otras toxinas que dañan la salud de los seres humanos. Además, hay que considerar la contaminación procedente de trenes, barcazas, barcos y el polvo carbonero procedente de estas operaciones que empeorarán los índices de enfermedades respiratorias, coronarias y cancerígenas de las comunidades colindantes.
“Una y otra vez, Ambre Energy ha mostrado su falta de preocupación por la salud pública y por las solicitudes de agencias estatales sobre los impactos de sus peligrosas exportaciones carboneras. La decisión de hoy apaga las ambiciones de la industria carbonera en el noroeste del país”, dijo Cesia Kerna de la coalición Power Past Coal.