(English follows)
El Estudio Revela Enormes Diferencias de Confianza entre los Anglosajones y los Hispanos
Washington, DC — Una nueva encuesta revela que la terrible crisis del agua potable en Flint, Michigan, parece ser solo un síntoma de un problema nacional que afecta especialmente a las comunidades de color.
El sondeo, realizado por Associated Press y GfK, descubre enormes diferencias entre la confianza de la población anglosajona y la hispana en la calidad su agua potable. Mientras que el 54% de los blancos no hispanos se muestra muy confiado en la calidad del agua, tan solo el 28% de los hispanos lo está.
Entre los hogares con ingresos inferiores a los $50,000 anuales, tan solo el 40% dice tener confianza en su suministro de agua potable.
El 30% de los norteamericanos beben agua embotellada. De estos, solo el 40% de los blancos no hispanos citan razones de seguridad para no beber agua del grifo. En cambio, el 60% de los usuarios de agua embotellada hispanos o afroamericanos la beben por razones de seguridad.
Las diferencias también son grandes en torno al papel que el gobierno federal debe jugar para asegurar un suministro de agua saludable. Mientras que la mitad de la población defiende que el gobierno federal debería hacer más por mejorar la calidad del agua potable, el 62% de los hispanos defiende este papel más activo.
En general, el 56% de los norteamericanos cree que la contaminación con plomo del agua potable de Flint es “señal de un problema más extenso”. En el caso de los afroamericanos, esta creencia está mucho más extendida, aunque el estudio no ofrece cifras concretas al respecto.
La encuesta también reveló una extraordinaria falta de confianza en los gobiernos locales a la hora de garantizar un suministro de agua limpia. Solo el 28% de todos los encuestados dijo que “confía mucho” en su gobierno local a la hora de tomar las decisiones correctas para asegurar el suministro de agua en su comunidad, mientras que el 18% dijo no confiar “para nada”.
El escándalo de Flint ha atraído gran atención del resto del país. El sondeo develó que casi el 60% de los encuestados dijo estar siguiendo la situación al menos “bastante de cerca”, incluyendo un 21% que dice estar prestando “mucha atención”.
La encuesta se realizó del 11 al 15 de febrero y el margen de error es +/-3.4%.
(English version)
National Poll Confirms Americans’ Concerns about Their Drinking Water
Survey Reveals Enormous Differences in Confidence Between Whites and Latinos
Washington, DC — A new poll reveals that Americans believe the water crisis in Flint, Michigan, could be a symptom of a national problem that particularly affects communities of color.
The poll, conducted by the Associated Press and GfK, finds enormous differences between how whites and Latinos in the U.S. view the quality of their drinking water. Whereas 54 percent of white Americans are very confident in their water quality, only 28 percent of Latinos are.
And among households with incomes below $50,000 per year, fewer than 40 percent say they trust their drinking water supply.
Thirty percent of Americans drink bottled water. Of those, only 40 percent of whites cite safety as a top reason not to drink tap water. On the other hand, 60 percent of people of color who drink bottled water do so largely because of safety concerns.
Differences are also great regarding the role the federal government should play to ensure a safe supply of drinking water. Whereas half of Americans say Washington should play a more proactive role, 62 percent of Latinos want more federal government involvement.
In general, 56 percent of Americans think the lead poisoning of the Flint water is “a sign of a more widespread problem.” Among African-Americans, however, this belief is more prevalent, although the poll does not provide concrete numbers in this regard.
The poll also reveals an extraordinary lack of confidence in local governments to guarantee a safe water supply. Only 28 percent of respondents said they had “a lot” of trust in it, whereas 18 percent said they do not trust their local government “at all” to make the right decisions about tap water safety.
The water scandal in Flint has attracted a lot of attention from the rest of the country, with about 60 percent of respondents saying they are following this situation at least “somewhat closely,” including 21 percent who are paying “close attention” to it.
The poll was conducted between February 11 and 15 and the margin of error is +/-3.4%.